Madrid siempre tiene algo nuevo que ofrecer, y el barrio de Salamanca es un ejemplo perfecto de cómo la ciudad se reinventa constantemente. Este mes, tres aperturas han conquistado sus calles con propuestas originales y exclusivas: Media Luna Pet Care, HollandBite y Akiro Hand Roll Bar. Desde un desayuno al más puro estilo holandés hasta una experiencia gastronómica nikkei, pasando por un espacio premium para el cuidado de mascotas, esta ruta ofrece planes para todos los gustos.
Febrero puede parecer eterno con sus días grises y sin festivos a la vista, pero la llegada de marzo trae consigo la promesa de la primavera. Para celebrarlo, nada mejor que comenzar el día con un desayuno en HollandBite, donde los stroopwafels recién hechos —esas galletas rellenas de caramelo típicas de los Países Bajos— se convierten en el mejor aliado para arrancar con energía.
Después de recorrer algunas tiendas en el barrio, un paseo por el Retiro es ideal para disfrutar del sol y hacer espacio para lo que viene después: un plan pensado tanto para los dueños de mascotas como para sus fieles compañeros. Mientras los perros reciben un tratamiento de grooming en Media Luna Pet Care, sus dueños pueden relajarse con un café en un entorno acogedor. La jornada culmina en Akiro Hand Roll Bar, donde la frescura y la técnica se combinan para ofrecer una de las experiencias gastronómicas más auténticas de la ciudad.
Un santuario para mascotas y sus dueños
Ubicado en la calle Claudio Coello, 100, Media Luna Pet Care redefine el concepto del cuidado de las mascotas. Su creadora, Panchi Game, se inspiró en su experiencia con su perrita Panka para diseñar un espacio que no solo ofrece servicios de grooming de alta calidad, sino también comodidad para los dueños. “Siempre me resultaba complicado encontrar un lugar donde esperar mientras arreglaban a mi mascota. O tenía que irme y volver más tarde, o terminaban poniéndola en una jaula. Quería crear un sitio donde ambos nos sintiéramos a gusto”, explica.
Aquí, mientras los perros reciben su tratamiento de belleza —que incluye baño con ozono sin coste adicional y precios desde 30 euros—, los dueños pueden disfrutar de una cafetería con bollería artesanal, trabajar o simplemente descansar. Si necesitan más tiempo, hay una zona especial donde los perros pueden jugar supervisados por 15 euros adicionales. “Queremos que la experiencia sea cálida, premium y sin estrés”, añade Game.
Un rincón de los Países Bajos en el corazón de Madrid
En la calle Velázquez, 104, HollandBite ha traído a la capital lo mejor de la repostería holandesa. Su fundadora, Rosa Isabel Sánchez, quedó fascinada por la gastronomía de los mercados de Ámsterdam durante sus viajes a visitar a su hija. “Descubrir los poffertjes y los stroopwafels recién hechos fue una experiencia increíble. No entendía por qué en Madrid no había un lugar donde probarlos”, comenta.
Con esa idea en mente, decidió traer la maquinaria original desde Holanda y recrear la experiencia en su propio local. El resultado ha sido un éxito: un espacio acogedor y fotogénico, donde los clientes pueden disfrutar de un brunch o una merienda mientras pasean por el barrio. Entre los favoritos del menú están la crema de pistacho y la de tiramisú, así como los postres personalizados. El ticket medio es de 15 euros.
El primer bar de hand rolls de Madrid
En la calle Hermosilla, 40, Akiro Hand Roll Bar ha revolucionado la oferta gastronómica con una propuesta única: el primer bar de hand rolls de la ciudad. También conocidos como temaki, estos rollos cónicos envueltos en alga nori y rellenos de arroz y distintos ingredientes combinan lo mejor de la cocina japonesa y peruana.
Luis Arévalo, chef y fundador, tenía claro su objetivo: “Queríamos algo diferente, un sitio donde la gente pudiera comer con las manos, disfrutando de bocados frescos y de calidad sin largas esperas”, explica. Utilizando ingredientes premium, como alga nori importada del mar de Ariake, Akiro se ha convertido en un referente en la ciudad.
Desde su apertura, la acogida ha sido espectacular, con una puntuación de 4,9 sobre 5 en Google. La experiencia está diseñada para que los comensales se sienten en la barra y vean en directo cómo los chefs preparan cada pieza. El local no acepta reservas, por lo que se recomienda llegar temprano o apuntarse en la lista de espera mientras se disfruta de un paseo por el barrio.
Entre sus platos estrella destacan el hand roll Ika, con chicharrón de calamar, alioli cítrico con tinta de calamar y cebolla encurtida; el hand roll de pulpo; el tartar de atún y los langostinos. Los precios varían entre 3 y 4 euros por nigiri y entre 4 y 8 euros por hand roll.
Con estos tres planes, el barrio de Salamanca se confirma una vez más como el epicentro de la innovación y la exclusividad en Madrid. Desde experiencias gastronómicas de primer nivel hasta espacios diseñados para el bienestar de las mascotas, la ruta promete una jornada llena de sabor, confort y sofisticación.