Si buscas una experiencia auténtica y en armonía con la naturaleza, Asturias es el destino perfecto. Con sus imponentes montañas, bosques frondosos y una costa salvaje salpicada de acantilados y playas escondidas, esta región ofrece el escenario ideal para desconectar y disfrutar del aire puro. Ya sea explorando los Picos de Europa, recorriendo la Senda del Oso en bicicleta o perdiéndote por los coloridos pueblos marineros, el alojamiento en un hotel rural te permitirá vivir Asturias de una manera genuina y acogedora.
Hotel Rural La Raposera Ubicado en Caravia, este encantador hotel combina la arquitectura típica asturiana con el confort moderno. Su privilegiada ubicación permite disfrutar de vistas panorámicas tanto del mar Cantábrico como de la imponente Sierra del Sueve. Las habitaciones, decoradas con esmero, garantizan una estancia cálida y relajante. A pocos minutos se encuentra la playa Arenal de Morís, perfecta para el surf y el descanso, así como rutas de senderismo que atraviesan bosques y praderas donde habitan los legendarios caballos asturcones. El cercano Mirador del Fitu ofrece vistas inigualables, desde la costa hasta los Picos de Europa.
Hotel Palacio de Prelo Situado en Boal, en el corazón del occidente asturiano, este hotel se asienta en un palacio del siglo XVI con vistas al valle del río Navia. Con pocas habitaciones, ofrece un ambiente exclusivo y sereno, ideal para quienes desean desconectar. Su ubicación permite explorar el legado indiano de Boal, conocer el casco histórico y disfrutar de una gastronomía basada en productos locales. En las cercanías, rutas como la del Castro de Pendia y la Sierra de la Bobia invitan a descubrir el paisaje asturiano en su máxima expresión.
Hotel Rural Arpa de Hierba A tan solo tres kilómetros de Llanes, este hotel inaugurado en 2008 destaca por su diseño cuidado, con grandes ventanales y balcones que regalan vistas a la Sierra del Cuera. Su finca ajardinada de 3.000 m² y su ubicación junto a un arroyo crean un entorno idílico para el descanso. Aquí podrás disfrutar de actividades como el descenso del Sella, rutas a caballo y trekking, además de explorar las playas y el casco histórico de Llanes, con su aire marinero y una oferta gastronómica que deleita a cualquier visitante.
Hotel El Rosal de Cudillero Este acogedor alojamiento en el emblemático pueblo pesquero de Cudillero es sinónimo de confort y hospitalidad. Sus habitaciones cómodas y un desayuno casero exquisito han conquistado a sus huéspedes. Alojarse aquí permite explorar el anfiteatro natural de Cudillero, recorrer sus estrechas calles y disfrutar de miradores con vistas espectaculares al Cantábrico. La gastronomía es otro punto fuerte: el pescado fresco y la sidra asturiana son imprescindibles en esta escapada.
Hotel Rural Casa Xusto En la costa occidental, en el concejo de El Franco, se encuentra esta casona del siglo XIX restaurada con esmero. Con 11 habitaciones cálidas y espacios comunes como un jardín y una sala con chimenea, ofrece una experiencia acogedora y singular. A pocos kilómetros, el puerto de Viavélez y la playa de Porcía son paradas obligatorias para los amantes del mar y la tranquilidad.
Alesga Hotel Rural Ubicado en Teverga, este pequeño hotel con spa es un refugio de paz en plena naturaleza. Su entorno privilegiado permite acceder directamente a la Senda del Oso, una de las rutas de senderismo más emblemáticas de Asturias. Además, la cercana Cueva Huerta y el Parque de la Prehistoria ofrecen experiencias únicas para los viajeros curiosos.
Asturias es mucho más que un destino; es una invitación a conectar con la esencia de la naturaleza, la historia y la tradición. Estos hoteles rurales te permitirán disfrutarla con todo el encanto y la comodidad que mereces.