El Ayuntamiento de Madrid refuerza su red de videovigilancia con la instalación de cámaras con inteligencia artificial en la emblemática plaza del Dos de Mayo. Estas 16 nuevas unidades, tres más de lo previsto inicialmente, se ubican estratégicamente en calles, jardines y accesos, permitiendo una cobertura integral, según ha informado el consistorio. Con esta incorporación, ya son 367 las cámaras operativas de la Policía Municipal, de las cuales el 40% han sido instaladas durante el mandato de José Luis Martínez-Almeida.
El alcalde asegura que el sistema, además de garantizar la seguridad, respeta plenamente la privacidad de los ciudadanos: «No habrá ninguna intromisión en la intimidad de las personas». Estas cámaras son parte de un proyecto más amplio que incluye dispositivos en otros puntos clave de la ciudad, como la Puerta del Sol, donde se busca disuadir incidentes y mejorar la percepción de seguridad.
Las cámaras de inteligencia artificial no solo facilitan la vigilancia, sino que también permiten realizar análisis avanzados. Según Joaquín Rodríguez, subdirector de Informática de la Policía Municipal, los dispositivos pueden rastrear objetos, matrículas y hasta personas mediante características específicas como colores de vestimenta. Sin embargo, aclara que el reconocimiento facial solo se utiliza en investigaciones específicas y bajo autorización judicial.
Por otro lado, el sistema también se aplica en la gestión del tráfico, con dispositivos en arterias principales como Alcalá o Princesa, lo que ha permitido optimizar semáforos, reducir atascos y detectar infracciones recurrentes.
La plaza del Dos de Mayo no es el único lugar que refuerza su seguridad. La reciente puesta en marcha de cámaras en plaza Elíptica y otras zonas como Lavapiés, Chueca y Montera responde al compromiso del Ayuntamiento de cubrir puntos estratégicos de Madrid. Además, están en marcha nuevos proyectos en áreas como el parque de Pradolongo y la calle Cullera, previstos para finales de año.
La videovigilancia cuenta con un sistema centralizado, el Centro Integrado de Señales de Vídeo (Cisevi), que supervisa las imágenes en tiempo real. Estas se almacenan durante 30 días y solo se accede a ellas bajo requerimientos judiciales. El alcalde enfatizó que todas las medidas cumplen estrictamente la normativa de protección de datos y están autorizadas por la Comisión de Vigilancia del Tribunal Superior de Justicia.
Durante su visita a la plaza, Almeida destacó que estas cámaras también contribuirán a combatir el botellón y otros problemas que afectan la convivencia vecinal. La plaza será además objeto de una remodelación integral. En colaboración con el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, se ha lanzado un concurso de ideas, con un presupuesto estimado de 2,3 millones de euros, y las obras se iniciarán en 2026.